Con goleada y un aire completamente remozado, así arranca la era Hayes en la selección de Estados Unidos, que promete volver a los tiempos de gloria de las barras y las estrellas.
Apenas cuatro días tuvo la entrenadora inglesa para preparar a las suyas en esta primera toma de o. Recién bajada del avión tras ganar su último título con el Chelsea, Hayes destacaba la gran recepción que tuvo por parte de sus nuevas jugadoras, deseosas de ponerse manos a la obra de cara a las inminentes olimpiadas.
La visión de Emma Hayes para la selección estadounidense es muy clara y quedó más que patente en este primer amistoso contra Corea del Sur. De los plomizos partidos de la era Andonovski a lo vivido este sábado, pasando por el periodo de transición con Kilgore al mando, las diferencias no fueron nada sutiles, sino más bien insultantes.
De ver a un equipo plano, muchas veces sin ideas o ambición a ver sobre el verde a un grupo de jugadoras bien lideradas y con ganas de demostrar que siguen siendo las mejores.
Hayes enumeraba sus primeras prioridades en sus primeras intervenciones como seleccionadora estadounidense: «Todos conocemos los ingredientes principales del ADN estadounidense», dijo el viernes en rueda de prensa. «Eso no cambiará bajo mi dirección».
Un día después, la promesa se cumplió: Mallory Swanson y Tierna Davidson aportaron dobletes cada una en la victoria por 4-0 sobre Corea del Sur. No hubo cambios radicales o profundamente sorprendentes en las tácticas del equipo ni en el once inicial. Como subrayó Hayes el viernes, se centró en los detalles más que en «cambios estructurales importantes».
Un equipo desesperado por mejorar
Una de las principales cosas que aprendimos sobre Emma Hayes en Colorado es que presentó una cantidad considerable de información nueva a los jugadores en tan solo unos días, prometiendo cerebros cansados en todos los ámbitos para un equipo que, según ella, estaba «desesperado por mejorar».
Como dijo el viernes, el equipo actuó como «esponjas, esponjas increíbles, sin importar lo que les hayamos arrojado esta semana». Y, desde luego, quedó más que patente viendo su partido en el Dick’s Sporting Goods Park.
La central Tierna Davidson, que anotó dos goles de cabeza tras dos tiros de esquina, dijo el viernes que el equipo se estaba concentrando en «las cosas más pequeñas en el entrenamiento». Después del partido, su nueva entrenadora no se sorprendió que hubiera estado en el lugar correcto para anotar sus dos goles en jugadas a balón parado porque fue algo en lo que el equipo trabajó la semana pasada.
«Tierna es una persona realmente reflexiva e inteligente», dijo Hayes. «Ella espera hasta comentar cualquier cosa en el entorno. Escuchó durante toda la semana, ensayamos varias cosas, no sólo jugadas a balón parado. Su atención al detalle, su capacidad para captar ideas… ha sido realmente bueno observarla a ella y a Naomi Girma durante toda la semana. Son dos mentes futbolísticas excepcionalmente talentosas».
Mucho que hacer en muy poco tiempo
Si bien Hayes se concentra en ordenar los detalles más pequeños en el campo, señaló una y otra vez los proyectos mucho más grandes fuera de él, específicamente en torno a generar confianza con las jugadoras y el entorno de la selección. En cada una de sus presentaciones en los medios durante estos días expresó estos conceptos dentro de su papel como educadora.
Esa confianza aún está en el comienzo de su camino. Mencionó sus planes individuales para cada jugadora la semana pasada en Nueva York, «pero todavía estamos en la etapa inicial de establecer una relación con las jugadoras, conociéndolas y conociendo sus historias de vida».
«Cuando aprendes un poco de lo básico, las interacciones comienzan a suceder, las opiniones comienzan a surgir. Una vez que las opiniones comienzan a surgir, podemos ir a los lugares que necesitamos», dijo el viernes.
«Quiero crear un ambiente en el que todas realmente disfruten de estar allí, que sea divertido, pero motivado y relacionado con el desempeño deportivo», dijo Hayes.
«Cada jugadora requiere una educación diferente. El trabajo de un entrenador es ayudar, no sólo a nivel táctico, sino también a nivel personal, y hay trabajo por hacer. Queremos un ambiente tolerante, respetuoso e inclusivo, aunque haya diferencias».
«Sólo quiero que todas tengan paciencia, sobre todo las más jóvenes. Están aprendiendo, quieren darlo todo por esta camiseta, quieren darlo todo por su país. Fuera del campo, algunas cometen errores, otras tienen que aprender. Mi trabajo como entrenadora es ayudarlas, enseñar y guiarlas».
Todas centradas en el proceso
Hayes destacó el sábado que quiere que todas los jugadoras se sientan apoyadas en el entorno de la selección: «Quiero asegurarme de que cuando nuestras jugadoras vengan a jugar y representen al equipo nacional, quiero que sepan que siempre me aseguraré de educar y hacer lo correcto en segundo plano para asegurarme de que todos cumplan con eso».
Si había un elemento que no le preocupaba, era la naturaleza solidaria del equipo, señalando al núcleo de liderazgo, incluidas la capitana Lindsey Horan y veteranas como Alex Morgan y Crystal Dunn.
«Ellas entienden lo que significa jugar para la selección y estoy muy impresionada con su trabajo fuera del campo y lo mucho que se preocupan las unas por las otras», dijo Hayes.
«Definitivamente hemos aprendido mucho, hemos cubierto mucho en los últimos días», dijo Sophia Smith el viernes. «Pero ahora mismo estamos centradas en el proceso. Se trata de implementar lo que hemos aprendido hasta ahora».
«No va a ser perfecto en absoluto. Queremos que sea perfecto cuando tenga que ser perfecto. En este momento, se trata simplemente de hacer lo que hemos estado trabajando, lograr esa química dentro y fuera del campo y disfrutarlo».
ESTADOS UNIDOS 4 – COREA DEL SUR 0
La selección EE.UU. abrió la era de Emma Hayes con una entretenida demostración de destreza ofensiva para lograr una dominante victoria por 4-0 sobre Corea del Sur.
El partido se jugó frente a más de 19.000 personas, donde las tres heroínas de su estado natal desempeñaron papeles importantes. Swanson (Highlands Ranch, Colorado) anotaba dos goles y ponía una asistencia, Sophia Smith (Windsor, Colorado) fue una auténtica pesadilla para la defensa coreana y lograba una asistencia, mientras que Lindsey Horan (Golden, Colorado) capitaneaba el equipo en una de las mejores actuaciones de las locales en los últimos años.
Les costó unos minutos a las de las barras y las estrellas encontrar un buen ritmo en ataque frente a un equipo coreano que jugaba con cinco defensoras y un bloque bajo.
El disparo de Catarina Macario desde lejos a los 12 minutos obligó a Kim Jung-Mi a realizar una parada, pero esa fue la primera llegada de calidad del combinado local. Minutos más tarde, Swanson obligó a Kim a realizar otra parada y Sam Coffey estrelló un disparo en la madera.
Estados Unidos se adelantó en el minuto 34 con un gol made in Colorado, para el delirio del respetable. El balón de Macario encontró a Sophia Smith en la parte superior del área de penalti. La delantera de las Thorns le ponía el balón a Swanson dentro del área, que no perdonaba.
Horan obligó a Kim a realizar una parada apenas tres minutos después. Del saque de esquina resultante, Macario encontraba a Davidson en la esquina más alejada del área chica. El cabezazo de la defensora se hundió justo debajo del travesaño para lograr el segundo gol internacional de su carrera, el primero después de casi seis años, el 31 de agosto de 2018. Con el 2-0 nos íbamos al descanso.
Sam Staab debutaba con la camiseta nacional
Después de anotar solo una vez en sus 57 partidos internacionales, Davidson se volvió codiciosa de la mejor manera posible y volvía a anotar apenas arrancaba la segunda mitad. Al igual que sus dos primeros goles internacionales, la central anotó con la cabeza en un tiro de esquina, esta vez encontrando el servicio de Swanson. La improbable anotadora se convirtió en la primera defensora de la selección estadounidense en anotar dos veces en un partido desde que Julie Ertz logró la hazaña con un par de remates a balón parado contra Colombia el 10 de abril de 2016.
Swanson firmaba su doblete en el minuto 74 y fue el sexto partido con dos goles en su carrera internacional. Rose Lavelle interceptaba un pase en el mediocampo y corrió hacia el área de penal antes de pasarle el balón a Swanson. El gol número 34 de la carrera internacional de Swanson coronó el marcador.
Entre los postes, la portera Jane Campbell jugó su octavo partido internacional (el primero desde octubre de 2021, también contra la Corea del Sur) y tuvo que trabajar poco para lograr la quinta portería a cero de su carrera con el combinado nacional.
La defensa Sam Staab pasará a los libros de historia por ser la primera jugadora en debutar con Emma Hayes.
Aún queda trabajo pendiente en el vestuario y en las salas de reuniones durante los pocos días que a Hayes le quedan con el equipo antes de que regresen a sus clubes, pero aún tendremos oportunidad de ver qué más se está cociendo en el segundo partido contra Corea del Sur que se disputará en Minnesota el martes por la noche. Será el último partido de las nuevas pupilas de Hayes antes de los Juegos Olímpicos de París.
FICHA DEL PARTIDO
Estados Unidos: Campbell (P), Nighswonger, Davidson (Staab, min. 61), Girma, Fox (Krueger, min. 46), Coffey, Horan (C) (Albert, min. 71), Smith (Shaw, min. 61), Macario (Lavelle, min. 61), Rodman (Dunn, min. 62) y Swanson.
Entrenadora: Emma Hayes.
Corea del Sur: J. Kim (P), Go (Jeoun, min. 72), Hong (H. Kim, min. 46), E. Lee, Choo, Y. Lee, Cho (Chun, min. 83), Kang, Phair (G. Lee, min. 58), Choe y Ji (C).
Entrenador: Colin Bell.
Goles: 1-0 Swanson (min. 34), 2-0 Davidson (min. 38), 3-0 Davidson (min. 48) y 4-0 Swanson (min. 74).
Árbitra: Carla Shaw-MacLaren.
Partido disputado en Dick’s Sporting Goods Park (Commerce City, Colorado).
Asistencia: 19.010 personas.
Incidencias: Tarjeta amarilla a Choo (Corea del Sur, min. 43).
Premio «Player of the Match»: Mallory Swanson.
Autora: Marga Martin
Fotografía: U.S. Women’s National Soccer Team