Ángela Merino Arranz 
Con la Reina Letizia presidiendo el palco de honor de la final de la Copa que lleva su nombre, después de que lo hiciera la última vez en la final de 2019 de la misma competición, que ganó entonces la Real Sociedad, y un gran ambietazo en las gradas del estadio zaragozano de La Romareda, que ha acogido dicha final, en la que las aficiones blaugrana y txuri-urdin se han comportado con una deportividad exquisita, el Barcelona se ha proclamado campeón de la Copa de la Reina al ganar por 8 a 0 a la Real Sociedad. Un éxito con el que cosecha el triplete de títulos en lo que lleva de temporada y con el que acaricia su principal objetivo: conseguir el póker, lo que tendrá a su alcance dentro de una semana en otra gran final, la de Champions League, que disputará en Bilbao ante Olimpique de Lyon.
Demasiadas concesiones de la Real Sociedad
Fiel a su resolución goleadora y al incontestable juego que vienen desarrollando durante toda la temporada, imponiendo su superioridad a cada rival al que se enfrentan y sometiéndolo, las culés le han impuesto un duro correctivo a una Real Sociedad que lo ha intentado todo y a la que no le ha salido nada.
Sus futbolistas, pese a su calidad, han cometido fallos poco habituales en ellas y que cuestan muy caros cuando se tiene delante al mejor equipo del mundo, mientras contemplaban además, impotentes, que en cada rechace y segunda jugada el balón les caía a las jugadoras culés, dándoles la fortuna una ventaja con la que, en algunas ocasiones, tan solo han tenido que empujar el balón al fondo de la red o fusilar en un uno contra uno a Elene Lete, la cancerbera blanquiazul, quien, pese al resultado, ha realizado intervenciones y paradas ‘enormes’, muchas, evitando a su equipo encajar una goleada mayor.
Las de Natalia Arroyo han recibido muy pronto el primer tanto, en el 5′, sin darles tiempo a desplegar sobre el césped la estrategia de juego que han estado preparando a fondo a lo largo de la semana, basada en mantener su puerta a cero el máximo de minutos posible, cerrando espacios, para sorprender a su rival con transiciones.
El Barça encamina la final a los 5 minutos
Sin embargo, han sido las realistas las sorprendidas en una magnífica jugada iniciada por Paralluelo en los tres cuartos de campo, desde donde le ha dado la pelota a Pina para que ésta la filtrara sobre una rapidísima Ona que, desde la banda izquierda, se ha guisado el gol… Allí, desmarcada, ha efectuado un centro que ha tocado Lete para tratar de evitar que fuera rematado el cuero. Éste le ha caído a Vanegas, que ha despejado en corto, llegándole el balón de nuevo a Ona, que había seguido corriendo hacia la portería, para rematar con acierto y colocar el 1-0 en el marcador.
Antes de ello el partido ha estado detenido durante tres minutos, al ser revisada la jugada por el VAR por un presunto fuera de juego de la propia Batlle cuando recibió el pase de Pina. La situación era dudosa, y ha costado dilucidarla arbitralmente pero finalmente la diana de Ona se ha dado por válida y las txuri-urdiñ se han venido abajo, no porque hayan cuestionado la decisión del VAR sino porque no han sabido reaccionar ante un gol tan madrugador.
Gran movilidad y juego por las bandas del Barcelona
Así, durante el resto de la primera mitad, han asistido a un recital de movilidad de las jugadoras del Barça, que han jugado sobre todo por las bandas, sin que el esférico pasara apenas por el medio campo, con triangulaciones y pases rápidos que han descolocado por completo a las defensoras guipuzcoanas.
De ese modo, en el 12′ y precisamente desde la otra banda, la derecha, se ha cocido el segundo gol culé, que ha empezado a crear Graham Hansen con un buen pase sobre Mariona, que se había desplazado hacia la derecha. La balear, pese a un duro marcaje de Eizagirre con el que ha terminado doliéndose en el suelo, ha conseguido colocar antes de caer un magistral centro al segundo palo, donde la ‘atleta’ Paralluelo ha ganado con su detente la posición a Vanegas y a Nahia Aparicio, entre las que ha saltado para, superándolas, alcanzar la pelota y cabecearla dentro de las mallas.
El 3-0 lo ha logrado Graham Hansen en el 18’al empujar un balón que le ha caído franco tras una parada de Lete con la que no atrapó el balón sino que lo devolvió hacia el interior del campo. En su intervención la guardameta vasca había logrado detener un tiro efectuado desde el balcón del área por Paralluelo después de que Aitana, más adelantada, le entregara de cara el balón a la aragonesa.
La Real no remata sus escasas ocasiones
Siguieron al tercer gol un par de rápidas transiciones de la Real, en la primera Bernabé se desmarcó por la izquierda pero terminó perdiendo el cuero, y en la segunda oportunidad Jensen enfiló sobre el área culé para terminar pasando a Sanni, quien la acompañó en la carrera por la derecha, pero en su definición le salió a la finlandesa un lanzamiento por encima del travesaño.
A continuación les cayó el cuarto a las realistas, incapaces hoy de frenar la velocidad letal de Paralluelo. La maña se fue en el 25′ por la izquierda en una de sus cabalgadas y bailes con el balón para colocarlo con un magistral pase al lado derecho, donde lo atrapó Graham Hansen, que había puesto la quinta para correr en paralelo a su compañera. La noruega se quedó sola ante Lete y le cruzó la pelota desde su lado a media altura para conseguir el primer doblete de la tarde. Luego vendría otro de Batlle y un tercero de Mariona.
Mariona Caldentey, MVP del encuentro
Apenas pasada la media hora de juego llegó la manita de las de Giráldez y el citado segundo doblete. Era el 33′ cuando Batlle le endosó el quinto a la Real cruzando la bola al interior de las mallas tras una estupenda asistencia de Mariona, su segunda en el encuentro. La balear, además, dio una tercera asistencia y logró también un doblete en el segundo tiempo y éste casi porque no le quedó otro remedio pues estuvo durante los 90 minutos mucho más pendiente de volver loca con su movilidad a la defensa blanquiazul y ayudar a sus compañeras que de ser la protagonista con sus goles. Su actitud, entrega y buen juego le dieron el reconocimiento de MVP del partido.
Con el 5-0 se llegó al descanso entre gritos de ánimo para las suyas de los aficionados donostiarras. Tras la reanudación del juego la Real Sociedad puso en práctica un esquema distinto al inicial, un 4-2-3-1 con el que tratar de evitar una goleada de escándalo, pero a duras penas consiguió contener a las culés en los minutos iniciales de esa segunda parte. Antes de que transcurriera el primer cuarto de hora de la misma el Barcelona ya le había marcado otros tres tantos.
Tres goles más antes de que las culés bajen el ritmo
El 6-0 se lo anotó Mariona en el 47′ después de que Paralluelo cazara en su banda un saque de Lete. La maña aprovechó la oportunidad para adentrarse en el área y devolverle la asistencia a la mallorquina, a la que entregó la bola para que la empujara dentro del arco realista.
El 7-0 lo logró Pina tras una asistencia de Mariona desde la izquierda. Y lo hizo en semicaída para culminar así una gran carrera con la que se esforzó en llegar hacia el segundo palo. Inicialmente el gol fue anulado por la colegiada del encuentro, pero rectificó enseguida tras ser revisada la jugada por el VAR.
El 8-0 lo consiguió Mariona a pase de Rolfö después de que la sueca robase un balón arriba. La balear fusiló a Lete con un disparo que pasó sobre la cabeza de la guardameta. Culminó así su partido más redondo de la temporada y, probablemente, uno de los más completos que ha jugado en sus ya más de 300 encuentros vistiendo la camiseta del Barça.
Después, las catalanas bajaron su intensidad, circunstancia favorecida porque ambos entrenadores aprovecharon la última media hora para realizar y agotar sus ventanas de cambios. Con estos respiros, las donostiarras se estiraron un poco y dejaron ver destellos de buen juego sobre el césped de La Romareda. El partido se cerró, de hecho, con dos saques de corners a su favor, en uno de los cuales a punto estuvo de conectar con la bola Vanegas para hacer el gol del honor. La defensa internacional colombiana se lanzó de cabeza con todo para intentarlo y terminó haciéndose daño al rodar con su empuje sobre el suelo. Corría el minuto 88′.
Cabeza alta y orgullo de las txuri-urdin por sus méritos
No hubo añadidos. El pitido final de la colegiada Eugenia Gil en el 90′ terminó con el sufrimiento de las txuri-urdin, que lloraron por el castigo recibido tras haber llegado a esta final muy emocionadas e ilusionadas. Pero sus aficionados, con una actitud encomiable pues no pararon de cantar a lo largo de todo el partido y de arroparlas, les devolvieron el orgullo con vítores y aplausos desde una grada plagada de banderas blanquiazules. Y las de Natalia Arroyo, también anegada en lágrimas, volvieron así a recuperar su esencia y mantuvieron sus cabezas altas. Lo que han hecho tiene mucho mérito. Dejaron en la cuneta para llegar a esta gran final al campeón del pasado año, el Atlético de Madrid, y al subcampeón de la Supercopa, el Levante. De sobresaliente hay que calificar su campaña.
En el lado culé ha sido Alexia la encargada de recibir la Copa en la grada de honor de manos de la Reina Letizia pero, una vez en el césped y junto a todas las futbolistas blaugranas, se la ha entregado a Paños, que ha ejercido hoy de capitana. La cancerbera, que ha jugado posiblemente su último partido con el Barcelona, es quien ha levantado el trofeo. Bonito gesto, al que ha seguido el éxtasis entre los aficionados culés y el Cant del Barça.
Ficha técnica:
FC Barcelona: Paños; Bronze (Torrejón, 62′), Irene Paredes, Engen, Ona Batlle; Patri (Walsh, 54′), Aitana (Alexia, 45′), Pina; Graham Hansen (Brugts, 67′), Salma Paralluelo (Rolfö), Mariona.
Entrenador: Jonatan Giráldez.
Real Sociedad: Elene Lete; Emma Ramírez (Viles, 81′), Nahia Aparicio (Etxezarreta, 70′), Vanegas, Arnaiz (Jacqueline, 58′), Alejandra Bernabé (Cecilia, 58′); Andreia Jacinto, Sanni Franssi, Eizagirre; Jensen (Lorena Navarro, 81′) y Amaiur.
Entrenadora: Natalia Arroyo.
Goles: 1-0: Ona Batlle (5′); 2-0: Paralluelo (12′); 3-0: Graham Hansen (18′); 4-0: Graham Hansen (25′); 5-0: Ona Batlle (33′); 6-0: Mariona (47′); 7-0: Pina (52′); 8-0: Mariona (58′).
Árbitra: Eugenia Gil Soriano.
Asistentes: Andrada Aloman e Iria Rosendo González.
Cuarta árbitra: Gloria Planes Terol.
Estadio: La Romareda (Zaragoza).
Espectadores: 25.617.
Autora: Ángela Merino
Fotografías: RFEF
